No soy
persona, no tengo identidad, ni nombre, ni sexo, ni forma alguna vez imaginada;
pues el único testimonio de mi existencia yace mucho tiempo atrás en la tesitura de mi lengua,en la palpitante respiración ausente, entre parpadeos de visiones
matriciales, en las palabras hilarantes que muchos creen que se refieren
amí; pero por más que creas y crean; recuerda no soy persona; dejé de serlo hace muchos años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario